Ya estamos aquí otra vez, por orden de llegada, yo que me encontraba viendo la formula uno a ver que había hecho el idelfonso, cuando llego manolico, luego vino javi el banquero, Ramón el faraón y un personaje que no puede faltar nunca en una reunión motera que se precie, la camarera, luego supimos que los que no venían es porque tenían algún compromiso, pero sus kilómetros reglamentarios los hicieron el Sábado por la tarde, ya que saben que si no sacan la faena, corren el riesgo de perder su chaleco.
¿Salida floja? nada mas lejos de la realidad, ahí estaba yo al frente de unos pocos que iban a picar como pardillos sucumbiendo al embrujo de mis encantos, propongo, que digo, impongo que hoy vamos a ir a almorzar a Albarracin, el pueblo en el que parece que no se puede almorzar pero que siempre se almuerza, bueno dicen, si no hay más remedio, así que salimos a la calle a armarnos con todos nuestros merca chifles cuando, de repente, ¿que es eso?¿es un pájaro?¿es un avión? noooo, es la señorita luismi que llega diez minutos tarde "ya os hubiera cogido, ya" dice la lista, que eres una lista, y ¿hacia dónde hubieras ido? lista, que eres una lista, en fin, que no le deje ni tomar café, se hizo la tonta para no poner fondo pero ahí estaba yo para recordárselo luego más tarde.
Total que salimos y mientras llegamos y no a Villafeliche, yo tengo la extraña sensacion de que algo pasa, pero no se que es, en fin, que llegamos, nos sentamos y se descubre el pastel; Dice la señorita luismi, "pues yo me he asomado a la ventana, y como no hacia frió, me he puesto los guantes de verano y voy jodido de frió" ¿guantes de verano?¿en pleno invierno? y hacia Teruel que allí no es verano ni en verano, ingenuo.
Total, que como todavía siguen imnotizados por mi presencia, pienso, la ocasión la pintan calva y mis suaves labios y mi dulce voz pronuncian la frase que termina de someterlos, vamos a volver dando la vuelta a la sierra de Albarracin, total son 10 ó 12 kilómetros más (incrédulos, 10 ó 12 y 68 kilómetros también), nos ponemos pues en marcha y nada más salir del pueblo, ¡¡¡ ahí esta !!! la maldita frase que no me deja vivir en un cartel que reza ¡¡¡ Visite Cuenca !!! &%$=¿@.
Le damos la vuelta a una de las rutas para mi mas bonita de las que hacemos, tanto por su paisaje como por su suave y sinuosa carretera, incluso el día nos obsequio con una preciosa amazona que montaba su negro corcel a pelo, que bonita visión (eso es lo que yo vi, pero en realidad era la vieja el visillo montada en una burra) de ilusiones también se vive.
Llegamos raudos a Santa Eulalia, y de ahí, directos como tiros a Calamocha, nada más pasar el pueblo, ¡¡¡ esta es la mía !!! pego un demarraje al que ni los mismísimos demonios hubieran podido responder, corro como alma que lleva el diablo sin mirar hacia atrás, con la intención de sorprender, esta vez si, a la señorita luismi (solo se le puede atacar a traición, si no, estas perdido, además nadie te garantiza el éxito, pero hay que intetarlo) que recordemos lleva guantes de verano, va jodido de frió, y se encuentra a cola de pelotón y con linea continua, esto no puede fallar.
Nada más lejos de la realidad, antes de llegar a Burbaguena, ya se distingue su negra silueta en mi retrovisor, recortándome metros a una velocidad, que parecía que le había dado un apretón y yo era su wc, malditooo seas luismi el ornitorrincoooo, antes de llegar a Daroca, ya estaba delante y yo como siempre detrás, agachando las orejas y sin rechistar hasta casa.
A todo hay quien gana.
